27.9.10

*******


Soy como un libro abierto. Nada de top-secrets. Bien es cierto que mi almohada,
mi cojín, mis manos cerradas, las de otro, los almohadones de las casas en las que dormí, todos, todos han soportado una parte de mi inconsciente, todos han acogido alguna vez aquellos sueños. Todos me saben. Pero yo, absoluta profana de los sueños,de sus fases, de sus interpretaciones, y, aún más, de su porqué, yo, no los olvido, y casi en cada despertar vuelven a mi, como flechas, para clavarse en mi, e mis ojos, en mi, consciente. Tengo una memoria que en vez de eliminar el recuerdo de los sueños en los primeros segundos de retorno a la vida consciente(cosa, a mi parecer, bastante razonable), me los echa de nuevo a la cara y de frente.
Soy como un libro abierto y los sueños se empeñan en habitarme. 
Nada de top-secrets.
Todo vuelve a mi, a mi, consciente.
Como si no tuviera bastante.


No hay comentarios:

Publicar un comentario